Comunidades guardianas del bosque: las protagonistas de las concesiones forestales
- El modelo de las concesiones forestales ha sido clave en el levantamiento de la economía local y en la conservación de la biodiversidad en los bosques tropicales. ¿Pero en qué consisten realmente y por qué han probado ser una herramienta tan importante para la protección forestal?
9 de junio de 2022. Consolidar un modelo productivo, social y técnico que favorezca la protección de los bosques tropicales a la vez que promueve el desarrollo rural, ha sido uno de los objetivos esenciales para el trabajo en manejo forestal sostenible que implementa el CATIE (Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza) junto con el Centro Francés de Cooperación Internacional Agronómica para el Desarrollo (CIRAD) en la región de Latinoamérica y el Caribe.
A través de diferentes investigaciones y estudios a lo largo de los años, además del trabajo colaborativo con organizaciones comunitarias, se ha demostrado que es posible un modelo que encuentre el balance entre el uso sostenible de los recursos del bosque como fuente económica y la conservación de su biodiversidad. Es así como surge el modelo de concesiones forestales.
Este modelo ha visibilizado cómo diversas comunidades en diferentes partes de la región se han convertido en verdaderas guardianas de los bosques tropicales. Por medio de las concesiones forestales se contribuye a una alianza público-privada que involucra a la población local en el manejo de los recursos naturales de una forma transparente, organizada y planificada.
El Petén, en Guatemala, es uno de los ejemplos más consolidados cuando de manejo forestal comunitario se trata, logrando impulsar la protección de los bosques tropicales y, a su vez, crear herramientas que potencien un desarrollo diversificado del bosque más allá de los productos maderables, lo cual permite una expansión de los recursos que ofrecen y generar ingresos para las familias.
Dentro de los productos no maderables se destacan las semillas del ramón, las hojas de xate, el chicle, la pimienta, la miel, entre otros. En el caso del ramón, esta es una especie forestal bastante abundante entre los bosques tropicales de México y Centroamérica, el cual ha sido reconocido por su alta calidad nutricional y medicinal. Por su parte, las hojas de xate se han destacado como una gran fuente de trabajo para muchas personas —especialmente mujeres— que, por medio de la recolección, clasificación y empaque de estas hojas, se ha consolidado en el mercado como un producto con fines ornamentales.
Asimismo, el manejo diversificado del bosque por medio de las comunidades aporta al freno de la deforestación, al control de incendios forestales, erradicación del aprovechamiento ilegal, control de la caza furtiva, a la conservación de la diversidad biológica y de la riqueza cultural de la región. “Todo esto está ampliamente documentado por diversos estudios técnicos y científicos realizados por varias organizaciones, así como por las continuas evaluaciones efectuadas por el CONAP (Consejo Nacional de Áreas Protegidas) y el Consejo Mundial de Administración Forestal (FSC, por sus siglas en inglés)”, expuso Fernando Carrera, investigador de la Unidad de Bosques y Biodiversidad en Paisajes Productivos del CATIE.
Estas concesiones se han establecido en la Zona de Uso Múltiple (ZUM) de la Reserva de la Biósfera Maya y están bajo la administración del CONAP. En total, existen alrededor de 500 000 hectárea que incluyen las 12 concesiones comunitarias y dos comerciales, quienes ya han operado desde hace más de dos décadas permitiendo la generación de mayores fuentes de empleo; aumento de los ingresos comunitarios; formación de empresas forestales comunitarias; inversión social; aumento de las capacidades técnicas y administrativas; y el reconocimiento internacional a través de la FSC.
Las concesiones forestales en Guatemala han evidenciado la importancia del involucramiento de los actores locales en la gobernanza forestal, alcanzando múltiples beneficios ambientales y socioeconómicos, los cuales ahora también contribuyen al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Por lo tanto, la visibilización de estos resultados significa apoyar y fortalecer el modelo concesionario, la conectividad social entre las organizaciones, así como su representación e incidencia política.
“El modelo Péten es un ejemplo para una promoción de las concesiones comunitarias como medida de conservación de los bosques tropicales del Antropoceno, a escala local, regional y mundial. A nosotros como instituciones internacionales de promover este modelo de interacción sostenible entre poblaciones y ecosistemas forestales, como una estrategia de conservación de los bosques tropicales, que permite un futuro más sostenible para nuestros amenazados bosques tropicales”, destacó Marie Ange Ngo Bieng, ecóloga forestal del CIRAD-CATIE.
Mayor información:
Marie Ange Ngo Bieng
Investigadora
Unidad de Bosques y Biodiversidad en Paisajes Productivos
marieange.ngo@catie.ac.cr
Redacción:
Dannia Gamboa Solís
Asistente de comunicación
Tecnología de Información y Comunicación
dannia.gamboa@catie.ac.cr